Renuncia del Ministro Álvarez

Álvarez: "Mi exclusión pudo ser necesaria pero hay formas que se deben guardar"

El ex ministro de Energía dijo que es el rostro visible de una línea de acción que acordó el Gobierno y que ante la opinión pública fracasó. Además, admitió que se enteró por la prensa de algunos cambios de criterio en el manejo del conflicto en Aysén.


Sin aceptar preguntas y tras reunirse con miembros de la directiva de la UDI en la sede del partido, el renunciado ministro de Energía, Rodrigo Álvarez, realizó esta tarde una conferencia de prensa, donde señaló que su decisión respondió a "visiones distintas" respecto al manejo del conflicto en Aysén y por "coherencia y dignidad política".

En ese sentido explicó que fue el rostro visible de una línea de acción que acordaron como Gobierno y que ante la opinión pública fracasó, ya que primero se exigió que no se podía negociar con violencia, que se debía superar el bloqueo, y luego "todo ello se modificó en un día".

Aseguró que inicialmente no compartía todos los argumentos del Ejecutivo, pero terminó cambiando de parecer y defendiéndolos con todas sus fuerzas. Por lo que al cambiarse el mecanismo de resolución del problema, en la práctica se redujo enormemente su capacidad de actuar como ministro.

"¿En qué conflicto sectorial o en cual región, o ante cuál tema ahora puedo ser un interlocutor? Por ello, por el bien del Ministerio de Energía y su rol en los desafíos del futuro también es correcto y es responsable renunciar", manifestó.

"Con esas nuevas condiciones sin duda podríamos haber llegado a un acuerdo semanas atrás y evitar tanto dolor en Aysén. Puedo entender el cambio de criterio, incluso puede ser la salida necesaria, pero siendo yo ante el país el representante de otros caminos, es preferible, es digno y responsable presentar mi renuncia", agregó.

Tras ello, Álvarez admitió que fue excluido de las negociaciones de La Moneda con los dirigentes del movimiento social de Aysén y que se enteró por la prensa de algunos cambios de criterio.

"Siempre pensaba que una de las pocas cosas que hace tolerable la política es trabajar en equipo, con visiones conjuntas y si no amistad al menos un razonable compañerismo. Me enteré sólo por la prensa de muchos de estos cambios de rumbo. Mi exclusión pudo ser necesaria, incluso imprescindible, pero hay formas que se deben necesariamente guardar", recalcó.

El ex secretario de Estado también expresó su alegría por el acuerdo alcanzado el viernes pasado en La Moneda, por la reanudación del diálogo y las soluciones encontradas para Aysén.

Indicó que siempre creyó que muchas de las medidas solicitadas eran justas y plenamente legítimas, como el perfeccionamiento de la zona franca, y dedicó algunas palabras a los dirigentes de Aysén.

"Mi reconocimiento, también, a Iván Fuentes y a la Mesa Social, así como mis disculpas sinceras si en algún actuar o decisión los traté injusta o indebidamente", sostuvo